Una buena reputación es igual a una buena publicidad.
Si nuestros clientes tienen una percepción positiva de los productos que vendemos, esta percepción influirá en otros posibles clientes que tengan interés sobre los mismos productos o servicios.
Es muy importante tener un plan de contingencia para saber cómo actuar si tenemos una
crisis de reputación. Hay que saber cómo actuar si recibimos una reseña negativa o alguna crítica de algún cliente descontento con alguno de nuestros productos.
Es fundamental
monitorizar los comentarios o las opiniones sobre nuestra empresa constantemente y poner en marcha posibles
acciones de prevención.
Por lo que respecta las estrategias de
posicionamiento SEO, un punto fundamental a tener en cuenta es la reputación que tengamos.
Los motores de búsqueda premiarán siempre a las empresas que tengan una buena
reputación online, y castigarán a aquellas que no tengan reseñas positivas.
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